¿Qué calefacción es la más barata?

Los tipos de calefacción son múltiples a nivel mundial, y no es fácil determinar cuál es el más barato o el más caro, ya que no todos se pueden utilizar en cualquier lado, ni los precios son los mismos. Sin embargo, en la Unión Europea he podido constatar que de todos estos sobre los que ampliaré más adelante, pueden y son utilizados. Además, son los sistemas de calefacción más económicos y eficientes. Estos son: calefacción eléctrica, gasoil, aerotermia, biomasa, gas natural y acumuladores de calor.
Para determinar qué calefacción es la más barata, cada usuario tiene que valorar dos aspectos en todas: el costo fijo y los variables. En este caso es el de instalación y los de mantenimiento y combustible utilizado, respectivamente. Nos referimos a gasto fijo porque se realizan una sola vez y variables porque su valor varía de período en período. Independientemente, claro, de que cada empresa tenga sus propios precios. Teniendo en cuenta esto, las organizaremos de mayor gasto económico a menor. Este valor, en el caso de los que no sean la calefacción eléctrica, se calcula tomando el precio del combustible utilizado que se necesita para producir un kW/h.
Además de analizar los precios de la energía, cabe mencionar varios factores muy relevantes, que influyen en gran medida.
FACTORES A TENER EN CUENTA:
- Estabilidad de los precios de combustible:

Reseñar que en el cuadro especificado no se establecen los enormes diferenciales al alza experimentados en el Segundo Semestre del 2021, en el Gas, gasóleo y electricidad
La evolución, con los precios disparados, de los mercados eléctricos y del gas, permiten ver mejor cual está siendo la situación durante 2021


Mercado electrico Mercado del gas
- Eficiencia energética:
España necesitaba en 2008 hasta 28 toneladas equivalentes de petróleo más que la UE15 para producir un millón de euros (28 toneladas más para producir lo mismo). Tan sencillo como eso. Necesitábamos más energía porque nuestros procesos productivos aprovechaban mal la energía que usaban. Desperdiciábamos buena parte de la misma. No éramos eficientes. Diez años después, en 2018 (año analizado por la Cátedra BP en su último Observatorio), seguimos siendo menos eficientes que nuestros vecinos. Más aún: según los autores del informe -José Bellver, Rafael Cossent,
Pedro Linares y José Carlos Romero-, la brecha que nos separa de la tasa de eficiencia de la UE15 ha crecido. “Entre los años 2000 y 2018 -explica el Observatorio-, la intensidad energética primaria en la UE15 se redujo en más de un 22%, mientras que en España esta reducción fue ligeramente inferior a ese 22%”. Así, continuamos un 15% por encima de la media UE15. En fin, que estos 18 años no solo no han servido para aproximarnos a la media UE15, sino que, antes al contrario, nos hemos alejado aún más de ella. Seguimos empleando más energía para producir lo mismo.
- Independencia energética:
España es dependiente energéticamente de combustibles fósiles en un 89% (datos del 2018).

El otro dato clave del último Informe publicado por la Cátedra BP es el relativo a la dependencia. “La dependencia energética de España respecto del exterior apenas muestra signos de mejoría y se mantiene en un 89%”. El sector energético español consumió 6,25 exajulios (EJ) de energía primaria en 2018. Y el 89% de esos exajulios llegó de allende las fronteras. Y estamos hablando de una cantidad de recursos (energéticos y económicos) realmente formidable. Según la Secretaría de Estado de Comercio (Gobierno de España), nuestro país gastó más de 47.000 millones de euros (M€) en importaciones de productos energéticos en 2018. Enviamos al extranjero ese año 130 millones de euros, cada día, para comprar productos energéticos, productos que luego no empleamos tan eficientemente como nuestros vecinos. 130 millones de euros diarios “evadidos” que perjudican así la calidad de vida de las familias, que consiguientemente cuentan con menos recursos para abordar otros gastos, y que perjudican la competitividad de las empresas, porque es que resulta que, además, las empresas pagan aquí más caro el gas que en la UE28
- ¿Cúal es la garantía de indendencia energética, sostenibilidad y ahorro?: LA BIOMASA
España es una potencia europea en recursos biomásicos de todo tipo. En concreto, España es el tercer país europeo por recursos absolutos de biomasa forestal (sólo por detrás de Suecia y Finlandia) y el séptimo en términos per cápita. Cuenta con una superficie forestal de 27.664.674 hectáreas (57% del total de la superficie) y es el país de Europa con mayor incremento de bosques, con un ritmo de crecimiento anual del 2,2%, muy superior a la media de la UE (0,51 %).
Por otra parte, España mantiene posiciones destacadas en otros recursos biomásicos susceptibles de utilización. En particular, es el principal productor de aceite de oliva del mundo (1.401.600 t en la campaña 2015-2016, muy por delante de Italia con 474.000 t) y ha alcanzado el primer puesto en la producción de ganado porcino en Europa, generando más de 50 millones de toneladas anuales de purines, además de ser uno de los principales países exportadores hortícolas de Europa. Pese a esta situación, España se encuentra a la cola en el ranking europeo por aprovechamiento de los recursos forestales y agroganaderos en la generación de energía eléctrica, térmica, biogás/biometano y valorización de la fracción orgánica de los residuos municipales.
Calefacción de eléctrica
Este tipo de calefacción utiliza los conocidos emisores térmicos. El costo de instalación es el menor de todos, ya que, por lo general, depende del costo de cada radiador que instale. El precio de estos es muy variable y puede ir desde los 10,00 € por un radiador pequeño hasta los 12.000€ por un sistema de calefacción de suelo radiante. El valor del consumo eléctrico promedio es el más alto 0,1329 €/kWh. No obstante a esto, es el sistema más utilizado a nivel mundial, a pesar de que muchos estén cambiando a energías renovables.
Gasoil
La calefacción con gasoil por combustible, tiene un costo de instalación muy barato y que necesita muy poco mantenimiento. Sin embargo, el valor del costo energético promedio es de los más altos, con 0,073 €/kWh; ya que el gasoil es un hidrocarburo derivado del petróleo: en este caso, es el gasoil C. A pesar de su bajo costo de instalación y mantenimiento, la calefacción de gasoil tiene muy baja eficiencia energética, es contaminante y el valor del hidrocarburo es muy fluctuante y alto. El más alto de todos en este post. Además, necesita un local seguro donde colocar el depósito, que por lo general ocupa bastante espacio. Debes tener en cuenta que este combustible es altamente inflamable.
Acumuladores de calor
Estos sistemas suelen usarse en los sistemas de calefacción eléctrica y con tarifas de discriminación horaria. Tal como dice su nombre: acumulan calor. El costo de instalación es bastante económico, si no se le suma al de la calefacción eléctrica. En su contra tiene que será necesaria la tarifa de discriminación horaria para que la carga del acumulador de calor se realice en este tiempo y sea económico; de lo contrario, el gasto sería muy alto. El valor del consumo energético es de 0,0674 €/kWh.
Calefacción por Biomasa
La biomasa tiene el costo de instalación muy bajo, quizás el segundo más bajo de todos como promedio. El valor del consumo eléctrico promedio es de 0,057 €/kWh. Esta calefacción es muy barata y utiliza combustibles naturales como fuente de energía pellets de madera u otros componentes ecológicos y naturales. Es una de las calderas de calefacción más baratas y ecológicas de todas.
Es una Buena referencia el Indice de Precios de Biomasa, publicada periódicamente por AVEBIOM (https://www.avebiom.org/proyectos/indice-precios-biomasa-al-consumidor )

A su favor tiene que los pellets utilizados como combustible son ecológicos, renovables, extremadamente baratos y de precio estable. Es energía limpia y renovable. A su contra tiene que necesitarás más espacio que el gasoleo (más menos el docle), dado que el equivalente orientativo es que 1 litro de gasoil, equivale en poder calorífico a 2 kg de pellet. La biomasa es una de las calefacciones de mayor eficiencia térmica de todas reduciendo a más del 70% del consumo eléctrico comparado con la calefacción eléctrica.
Otra ventaja que se debe valorar, es que al apostar por la biomasa, es muy sencillo alacnazar el Certificado Energético de maxima calificación para nuestra vivienda, dado que dichos certificados energéticos, se contabilizan por el aislamiento y por las emisiones de GEI a la atmósfera.
También se puede reseñar que la eficiencia estacionaria de los equipos de biomasa suelen rondar entre el 85% y el 115%, con una tecnología muy evolucionada.
También no debemos olvidar que al instalar un equipo de biomasa que sustituye un equipo de combustible fósil, podemos vender las Tm de CO2 que no emitimos. Hay entidades que se encargan de todos estos trámites, como el canal clima de Avebiom. (https://www.avebiom.org/proyectos/canal-clima )
Gas natural
Este es el sistema de calefacción más demandado en España, seguido por la eléctrica y por las energías renovables como los pellets (a la que se están pasando la mayoría de consumidores). Para muchos es la calefacción más barata de todas. El costo de instalación, por lo general no supera los 5000,00 € y en él entra la caldera y un variado número de radiadores. El consumo eléctrico promedio es de 0,053 €/kWh. Su funcionamiento es simple: la caldera emite agua caliente que circula por los radiadores, los cuales emiten el calor hacia la habitación. Está pensado para todo tipo de clima, ya que, en dependencia del gas que usen, pueden funcionar hasta con temperaturas de -40 grados celsius. En su contra tienen que sus instalaciones no llegan a todas las zonas.
Aerotermia
Este sistema extrae la energía calorífica del aire y la convierte en frío o en calor, como tú desees. El costo de instalación es uno de los mayores de todos, independientemente del tipo de equipo que vayas a utilizar. El precio puede ir desde 7000,00 € hasta 25000,00 € en dependencia de la potencia del sistema. Sin embargo, el valor de consumo promedio es de 0,0038 €/kWh. Este sistema puede ahorrar más del 60% del valor de la factura mensual y su mantenimiento es mínimo. Este sistema puede combinarse con otros, sin embargo, esto llevaría un costo adicional en equipamiento. No obstante, a largo plazo, es el sistema de calefacción más barato.